Frei Betto*.- Santa Teresa de Ávila en el Brasil es el título de la publicación bilingüe sacada a finales del 2015 por la embajada de España en nuestro país, junto con la Sociedad Cultural Brasil-España.
En el año de celebración de los 500 años del nacimiento de la mística española, que vivió entre 1515 y 1582, los editores enriquecieron la publicación con textos de excelente calidad firmados por Nélida Piñon, Begoña Sáez Martínez, Lucia Pedrosa-Padua, Dante Marcello Claramonte Gallian, María de la Concepción Piñero Valverde, Roberta Bacellar Orazem, Silvia Fernandes y las hermanas carmelitas de Rio de Janeiro.
La presencia de Teresa en el Brasil comienza a notarse desde 1742, al fundarse el primer monasterio de monjas carmelitas descalzas en el barrio carioca de Lapa. Inspirado en la comunidad ubicada allí, surgió el famoso Bloque de las Carmelitas, que anualmente desfila en la apertura y en la clausura del carnaval. Cuenta una leyenda que algunos desfilantes se cubren el rostro con un velo para que nadie reconozca a la religiosa que todos los años traspasa el muro de la clausura para unirse a los festejos de Momo…
La obra de Teresa sólo empezó a traducirse en nuestro país a partir de comienzos l siglo 20, aunque circulaban ediciones en español en nuestras bibliotecas. El año 2010 su autobiografía (Libro de la vida) fue objeto de una muy cuidada edición por parte de la editora Peguin / Companhia das Letras.
El Brasil cuenta hoy con 38 comunidades de carmelitas descalzas, lo cual comprueba que la vida contemplativa femenina todavía atrae a jóvenes dispuestas a una entrega radical a la intimidad amorosa con Dios.
Teresa se hace presente en el arte brasileño, inspirando a poetas, novelistas y dramaturgos. Murilo Mendes, Cecilia Meireles, Adélia Prado y Bruno Tolentino bebieron en sus fuentes místicas. Rachel de Queiroz tradujo su autobiografía. Deonisio da Silva la homenajeó con la novela Teresa, enamorada de Jesús (2005), adaptada después al teatro. Marisa Marega publicó en el 2015 Mujeres pioneras más allá de su tiempo, relato de la trayectoria de santa Teresa y de su discípula del siglo 20 madre Teresa de Jesús, que destacó por su coherencia evangélica en el carmelo de Juiz de Fora.
Y reconocen influencias de Teresa los escritores Nélida Piñon, Geraldo Mello Mourão, Guimarães Rosa y Ariano Suassuna. El premiado texto La lengua en pedazos, del dramaturgo español Juan Mayorga, en el cual retrata los conflictos de Teresa con la Inquisición, mereció ser representado en São Paulo, con el teatro abarrotado en todas sus representaciones. Y de entre la amplia bibliografía aparecida en el Brasil sobre la santa designada con el título de Doctora de la Iglesia, destaca la obra Teresa de Ávila. Mujer, mística, doctora, de Otger Steggink, del año 2015.
¿Qué tiene Teresa de especial? ¿Por qué suscita tanto atractivo sobre sicoanalistas, incluso ateos? Desde luego el itinerario de esta monja carmelita contraría toda la lógica eclesiástica. Sus obras -bestsellers permanentes- fueron escritas en una época en que la Iglesia silenciaba a las mujeres para mantenerlas analfabetas. Su mística vence todas las suspicacias inquisitoriales de que se trataba de un caso de perturbación mental. Su teología sorprende por haber sido autodidacta en la materia, de modo que fue detalladamente examinada y aprobada por renombrados teólogos de la época. Su entusiasmo místico no demuestra el menor pudor al expresarse con el mismo lenguaje coloquial de los amantes, indiferente al moralismo predominante en la Iglesia española del siglo 16. En este sentido no hay duda de que Teresa merece también el título de pionera del feminismo.
* Frei Betto es escritor, autor de «Un Dios muy humano», entre otros libros.
www.freibetto.org/> twitter:@freibetto.