“El libro de la Sabiduría (…) nos habla del justo perseguido, de aquel cuya ‘sola presencia’ molesta a los impíos. El impío es descrito como el que oprime al pobre, no tiene compasión de la viuda ni respeta al anciano. El impío tiene la pretensión de creer que su ‘fuerza es la norma de la justicia’. Someter a los más frágiles, usar la fuerza en cualquiera de sus formas: imponer un modo de pensar, una ideología, un discurso dominante, usar la violencia o represión para doblegar a quienes simplemente, con su hacer cotidiano honesto, sencillo, trabajador y solidario, expresan que es posible otro mundo, otra sociedad». (Papa Francisco, 2018).
Somos mujeres y hombres, miembros de las distintas Comisiones de Justicia y Paz de América Latina y el Caribe. Con ocasión de los trágicos acontecimientos que están sucediendo en tierra nicaragüense, creemos indispensable dirigirnos a nuestros hermanos:
1.- En primer lugar, unas palabras a todos los hijos de la tierra de Sandino: queremos que experimenten la solidaridad fraterna de sus hermanos latinoamericanos. Sabemos de sus sufrimientos y permanentes luchas contra la opresión e injusticia. Recordamos como el pueblo heroico nicaragüense derrotó a la dictadura de Somoza, haciendo renacer la esperanza. Y confiamos en que, como entonces, nuevamente la justicia, la libertad y la fraternidad, triunfarán y se impondrá la paz desde el diálogo y la solidaridad.
2.- Nuestra cercanía y unidad con el Pueblo de Dios que peregrina en la bendita tierra mártir nicaragüense. Ustedes son portadores de esperanza y reconciliación para un pueblo de hermanos, dividido y violentado como si se tratara de enemigos dentro de casa. Que Jesucristo sea la fuerza que necesitan para testimoniar la verdad, la justicia y la libertad en las situaciones de grave conflicto que están viviendo. Y no duden que al final la verdad, la justicia y la libertad triunfarán.
3.- A los gobernantes y demás autoridades de Nicaragua, les recordamos que el poder recibido del pueblo, lo recibieron para que lo sirvan y busquen su bien como única razón de Estado. Sabemos, que todo poder es transitorio, que los gobernantes cambian y la historia hace justicia.
4.- A nuestros hermanos latinoamericanos y caribeños, les convocamos a estar atentos al desarrollo de los acontecimientos, exigiendo el diálogo franco entre las partes en conflicto, pidiendo la intervención de países hermanos y de organismos internacionales y por sobre todo, clamando al Señor de la Paz para que con su intervención, termine el sufrimiento de nuestros hermanos nicaragüenses.
Dios Padre y Madre, aumenta nuestra fe y amor por el prójimo, conviértenos en instrumentos de tu Paz y guíanos en la construcción de tu Reino. Te lo pedimos en el nombre de Jesucristo, nuestro Señor.
Red Eclesial en formación de Comisiones de Justicia y Paz y organismos afines de la Iglesia Católica de América Latina y el Caribe
Carta semanal de la Comisión Ecuatoriana Justicia y Paz | Con los ojos fijos en Él, en la realidad y la fe.
Carta No. 146– 21 de agosto 2022