Español
English
Português
Bajo el lema “Madre, míranos con ternura, queremos unirnos como pueblo”, el 1 y 2 de octubre miles de fieles reafirmaron su fe en un trayecto de 60 kilómetros cubiertos a pie, en la 48º peregrinación al Santuario de la Virgen de Luján, en Argentina.
Cada año, los devotos de la Virgen de Luján participan de esta gran marcha, una de las más convocantes del país.
Partiendo desde el Santuario de San Cayetano, en el barrio de Liniers, en Buenos Aires, cubren casi 60 kilómetros a pie hasta llegar a la localidad de Luján.
Allí se encuentra la Basílica y Santuario Nuestra Señora de Luján, que data de 1685, cuando en el lugar se levantó una pequeña capilla, que con el tiempo se fue trasformando hasta convertirse en la basílica dedicada a Nuestra Señora de Luján, patrona de Argentina.
Miles de familias, con participación de numerosos jóvenes, partieron a las 10 de la mañana del sábado para comenzar a arribar durante la madrugada del día siguiente. La alegría y la emoción de la llegada disimularon cualquier atisbo de cansancio.
Los medios masivos de comunicación y las redes sociales cubrieron el trayecto, mostrando diferentes testimonios de fe, agradecimientos y también pedidos hacia la Virgen.
El buen clima acompañó a los peregrinos, en una marcha que contó con más de 6.000 voluntarios y varios puestos de hidratación y otros tipos de asistencia, para lograr una perfecta organización en esta multitudinaria manifestación.
El lema de este año
El lema de este año surgió de aquello que los peregrinos escriben en los cuadernos de la Basílica de Luján, explicaron los organizadores.
“La preocupación de los fieles denota la necesidad de armonía, acuerdo, amistad y unión en todos los órdenes de la vida. De los miles de pedidos a la Virgen de Luján, el común denominador es la unión en sus familias, hogares, barrios, en el país”, comentaron.
Imagen de la Virgen peregrina
Junto a los creyentes, la imagen peregrina de la Virgen de Luján fue también protagonista de todo el camino.
Bendecida por el Papa Francisco en 2013, la imagen, que luego recorrió todo el país, estuvo una vez más presente en esta jornada tan especial para la Iglesia argentina.
Redacción: Miguel Monforte. SIGNIS Argentina
