Facebook   Twitter   Instagram   Youtube   Flicker

Papa Francisco pide crear lazos de unidad y fraternidad con migrantes y refugiados

Ciudad del Vaticano.- En un mensaje dirigido a los invitados al almuerzo para refugiados y migrantes organizado por Caritas Internationalis, en el marco de la Semana Global de Acción, que se desarrolla del 17 al 24 de junio, en concordancia con el Día Mundial del Refugiado, que se celebra el 20 de junio, el Papa Francisco hizo un llamado a todas las comunidades «a crear lazos de unidad y renovada fraternidad con los migrantes y refugiados». El almuerzo, que se cumplió el martes 19 de junio, es parte de la campaña «Share the Journey», es decir, «Compartiendo el Viaje», lanzada por el Papa Francisco el 27 de septiembre de 2017 y que durará hasta el año 2019.

Un almuerzo para compartir fraternidad

La idea es que las organizaciones de Caritas en todo el mundo realicen actividades relacionadas con la migración basadas en los cuatro verbos propuestos por el Papa: Acoger, Proteger, Promover e Integrar.

Dentro de estas acciones, se invita a participar en una «Comida Compartida» con migrantes y refugiados: sentarse a la mesa, compartir testimonios e historias de vida, en torno a la riqueza gastronómica que vamos encontrando en nuestros hermanos que vienen de otros países.

El mensaje del Papa para los migrantes y refugiados

En esta ocasión, antes de iniciar la comida Mons. Feroci, director de la Cáritas diocesana, leyó a los participantes el mensaje escrito que les envió el Papa Francisco «animándolos a continuar en este camino de apoyo a los migrantes y refugiados, compartiendo juntos este almuerzo organizado por Caritas».

«Invito a todos -migrantes, refugiados, trabajadores de Caritas e instituciones- a descubrir los momentos de esta campaña que más los han marcado y a preguntarse ¿qué esperanza anima sus caminos?», escribió el Pontífice exhortándolos a «celebrar aquello que los une».

«Aliento a Caritas, a la comunidad de fieles, a sus pastores y a todas las personas de buena voluntad; a crear siempre nuevos espacios para compartir, para que de nuestros encuentros pueda germinar una renovada fraternidad con los migrantes y refugiados», se despidió el Santo Padre, enviando su bendición y deseándoles un buen almuerzo.