El arzobispo de Barranquilla, monseñor Pablo Emiro Salas Anteliz, en nombre de los obispos de esta jurisdicción eclesiástica, se ha solidarizado con la población de la costa Caribe de Colombia ante el incremento de las tarifas de energía eléctrica. A través de un comunicado, el prelado católico expresó que «como Pastores de la Iglesia Católica que peregrina en estas jurisdicciones eclesiásticas, nos solidarizamos y acompañamos al pueblo de Dios en sus justos y legítimos reclamos, en orden a alcanzar una mejor calidad de vida”.
En el pronunciamiento, han mostrado su preocupación ante la situación que están viviendo los comerciantes y la comunidad en general por las alzas desproporcionadas en el servicio eléctrico.
Según cifras emitidas por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), durante el mes de agosto se presentó una subida del 25,9% en el costo de la energía eléctrica en Colombia, encabezando la lista Santa Marta (49,9%) seguido de Riohacha (47,1%), Barranquilla (44,4%), Sincelejo (40,7%), Valledupar (40,4%) y Montería (40,4%).
Llamado al Presidente de la República
Por ahora, los obispos hacen un llamado al presidente de la República, Gustavo Petro, en aras de “dar solución a este problema que aqueja a todos los habitantes de la Región Caribe”.
“Pedimos a las autoridades territoriales, como también a los Senadores y Representantes de la Región Caribe, que sean portavoces del pueblo que los eligió y aúnen esfuerzos para lograr satisfacer, ante las entidades competentes, los justos reclamos de los ciudadanos”, reza el comunicado.
Para finalizar, envían una sugerencia a las empresas generadoras de energía a “revisar sus márgenes de ganancia a fin de mitigar el drama y las afugias por las que atraviesan los usuarios de este servicio, tanto los usuarios residenciales, como también los del comercio y de la industria” acotaron.
Redacción: Ángel Morillo, corresponsal de SIGNIS ALC en Colombia