María Rosa Lorbés*.- Confirmando que a la Iglesia nada de lo humano puede serle ajeno, la Conferencia Episcopal Peruana ha hecho público el día jueves un pronunciamiento titulado «Mantener Viva la Esperanza», ante la grave crisis que agobia a nuestro país.
Dos puntos constituyen el centro del mensaje: el primero es el rechazo a seguir tolerando la corrupción, que se expresa como consecuencia del deterioro de los valores éticos, del silencio cómplice, del blindaje político, de la inaceptable primacía de los intereses personales y grupales en desmedro del bien común. Los obispos coinciden con la indignación de la población, en la que ven un clamor de auténtica justicia y por la cual los peruanos «exigimos una sociedad que se sustente en el respeto irrestricto de los principios democráticos y del orden constitucional, que garanticen el efectivo logro del bien común y el desarrollo integral de todos los peruanos». Enfatizan también que urge la tarea de recomponer la clase política y consolidar los poderes del Estado en su independencia y autonomía.
El segundo gran tema es la invitación a participar en el próximo Referéndum del 9 de diciembre, el cual la Iglesia considera como un momento histórico y decisivo. Los prelados recuerdan que «la ciudadanía tiene el derecho a ser informada y la obligación de informarse a fin de emitir un voto cívico, consciente y responsable.
Recordemos que este instrumento de participación ciudadana pone en manos de todos los peruanos la oportunidad de encauzar la fuerza de un pueblo que hoy clama por un cambio radical». Como ciudadanos y como cristianos, tenemos la responsabilidad de informarnos y exigir información para fundamentar nuestra decisión sabiendo que, aunque el referéndum no sea la solución para todos los males que aquejan a nuestra democracia, constituye un paso muy importante.
* Comunicadora, socia de la Asociación Peruana de Comunicadores Monseñor Luciano Metzinger, SIGNIS Perú.