Ciudad del Vaticano.- Conforme se había anunicado, la tarde del sábado 27 de agosto, el Papa Francisco presidió el Consistorio Público Ordinario en el que se formalizó la creación de 20 nuevos cardenales, que se integran al Colegio Cardenalicio. En la ceremonia, que se celebró en la Basílica de San Pedro, también se llevó a cabo la aprobación de las causas de canonización del fundador de los misioneros Scalabrinianos, Juan Bautista Scalabrini, y del laico salesiano ítalo-argentino Artémides Zatti.
En su reflexión, el Santo Padre se refirió al fuego como símbolo del Espíritu Santo que «el Señor quiere comunicarnos su valentía apostólica, su celo por la salvación de cada ser humano, sin excluir a nadie», dijo.
Según explicó, “Quiere comunicarnos su magnanimidad, su amor sin límites, sin reservas, sin condiciones, porque en su corazón arde la misericordia del Padre».
Agregó que «dentro de este fuego se encuentra también la tensión misteriosa, propia de la misión de Cristo, entre la fidelidad a su pueblo, a la tierra de las promesas, a aquellos que el Padre le ha dado y, al mismo tiempo, a la apertura a todos los pueblos, al horizonte del mundo, a las periferias aún desconocidas.”
También comentó que «este fuego arde, de modo particular, en la oración de adoración, cuando estamos en silencio cerca de la Eucaristía y saboreamos la presencia humilde, discreta, escondida del Señor, como un fuego en ascuas, de manera que esta misma presencia se convierte en alimento para nuestra vida diaria».
Recordó que el fuego le hace pensar, por ejemplo, en Carlos de Foucauld, «quien, al haberse encontrado por mucho tiempo en un ambiente no cristiano, en la soledad del desierto, centró toda su atención en la presencia, tanto la presencia de Jesús vivo en la Palabra y en la Eucaristía, como la propia presencia del santo, que era fraterna, amigable y caritativa«.
De igual manera, recordó a los hermanos y hermanas «que viven la consagración secular, en el mundo, alimentando el fuego bajo y duradero en los ambientes laborales, en las relaciones interpersonales, en los encuentros de pequeñas fraternidades; o también como sacerdotes, en un ministerio perseverante y generoso, sin hacer alarde, en medio de la gente de la parroquia».
¿Qué me dice a mí y a ustedes este doble fuego de Jesús?
Dirigiéndose a los hermanos Purpurados, resaltó que «a la luz y con la fuerza de este fuego camina el Pueblo santo y fiel, del cual hemos sido convocados y al que hemos sido enviados como ministros de Cristo, el Señor».
«¿Qué me dice a mí y a ustedes, en particular, este doble fuego de Jesús?», se preguntó el Santo Padre. «A mí me parece que nos recuerda que el fuego del Espíritu mueve al hombre lleno de celo apostólico a cuidar con valentía tanto las cosas grandes como las pequeñas, porque non coerceri a maximo, contineri tamen a minimo, divinum est”, añadió.
Francisco recordó que «un Cardenal ama a la Iglesia, siempre con el mismo fuego espiritual», ya sea tratando las grandes cuestiones («la grande diplomacia») como ocupándose de «las pequeñas cosas pastorales», encontrándose con los grandes de este mundo y con los pequeños, «que son grandes delante de Dios».
¿Puedo contar con ustedes?»
El Papa remarcó que Jesucristo nos lleva a cada uno por nuestro nombre. «Nos llama por nuestro nombre, nos mira a los ojos, a cada uno de nosotros: mirémonos a los ojos, y nos pregunta: Tú, nuevo cardenal, y todos ustedes, hermanos cardenales: ¿puedo contar con ustedes?», interpeló a los nuevos Purpurados.
América Latina tiene 4 nuevos cardenales
Entre los 20 nuevos cardenales que fueron creados por el Papa Francisco,en el consistorio que tuvo lugar el sábado 27 de agosto, se cuentan cuatro purpurados de América Latina: Monseñor Leonardo Ulrich Steiner, arzobispo metropolitano de Manaos, en Brasil; Monseñor Paulo Cezar Costa, arzobispo metropolitano de Brasilia; Monseñor Jorge Enrique Jiménez Carvajal, arzobispo emérito de Cartagena de Indias, en Colombia; y de Monseñor Adalberto Martínez Flores, arzobispo metropolitano de Asunción, en Paraguay (el primer cardenal en la historia de este país).
Fuente: Vatican News