Durante su homilía del 30 de enero de 2012, en Viena (Austria), el Cardenal Schönborn afirmó que Hildegard Burjan demuestra que la santidad es posible en la política. Añadió que «anunció el Evangelio con la acción. Su beatificación llega en el momento justo para subrayar, precisamente, que el meollo de la cuestión es la acción, dijo. El Papa Benedicto XVI recordó el mismo día, al final del Ángelus, a la nueva beata afirmando que ofreció con su vida un «hermoso testimonio del Evangelio».
Hildegard Burjan, de origen judío, nacida como Hildegard Freund en 1883 en la entonces ciudad prusiana de Görlitz. Perteneció a una familia judía no practicante. Una joven muy inteligente, Hildegard fue una de las primeras mujeres en estudiar filosofía en Zúrich.
Hildegard Freund nació en el seno de una familia judía no practicante. Tras su matrimonio, y como consecuencia de una enfermedad, descubrió la fe cristiana, y fue bautizada en 1909.
En 1907 conoció al ingeniero húngaro judío Alexander Burjan en Zúrich y juntos se fueron a vivir a Berlín para estudiar ciencias políticas y economía. Dos años después se casaron. Luego de casada, Hildegard obtuvo el doctorado en filosofía. en 1909 Hildegard cayó enferma por un serio problema en el riñón que estuvo a punto de llevarla a la muerte. Luego de una serie de operaciones, los médicos la declararon desahuciada. Hildegard atribuyó la cura a un milagro. Durante su convalecencia en el hospital, Hildegard observó la labor social de las monjas en el hospital y pidió ser bautizada en ingresó en la Iglesia Católica.
Por motivos laborales, los Burjan se mudaron a Viena. Allí Hildegard quedó embarazada pero por sus graves problemas renales, los médicos le sugirieron que abortara el bebé. Hildergard consideró esa sugerencia como un asesinato y arriesgó su vida por dar a luz al bebe. El bebé fue una saludable niña de nombre Lisa.
Vivió la actividad política como un servicio al Evangelio, a favor de los trabajadores oprimidos, siguiendo las enseñanzas de la Encíclica social «Rerum novarum», del Papa León XIII.
En 1912 fundó la Asociación de las obreras cristianas a domicilio.
Fue la primera mujer en ser miembro del Consejo Municipal de la ciudad de Viena en 1918 por el Partido Socialcristiano y en 1919 sería diputada por el mismo partido en el Consejo Nacional de Austria. Desde allí trabajó por los menos favorecidos.
Durante aquellos años en Viena existían graves problemas sociales. En 1919 Hildegard se decide a fundar la organización femenina Caritas Socialis. Constituida por un grupo de diez mujeres, organizaron una agencia de empleos, hogares para persona convalecientes y hospitales para enfermos y dementes. También fundaron hogares para madres solteras, para jovencitas y mujeres adultas sin hogar, y agencias de distribución de comida caliente para los pobres.
Ayudó a las poblaciones que padecían hambre. Creó una red de asistencia a las familias y luchó contra el trabajo de los menores.
En los pobres y en los que sufren veía el Rostro de Jesús y se sentía sedienta de justicia: «Con el dinero y las pequeñas limosnas -decía- no se ayuda a las personas, sino que es necesario volver a darles confianza en que son capaces de hacer algo por sí mismas».
Sus problemas renales la llevaron a la muerte en 1933, con tan solo 50 años de edad.
En 1963 el cardenal Franz König inició su causa de beatificación. En 2007 se la declaró venerable. En 2011 se le reconoció un milagro.
El 29 de enero de 2012, Hildegard Burjan fue declarada beata. La celebración de su beatificación se realizó en la en la Catedral de San Esteban, Viena (Austria).
Su lema era: «Entregada completamente a Dios y completamente a la Humanidad».
Con información de VIS y Wikipedia