Falleció el arzobispo Desmond Tutu

A la edad de 90 años, este domingo 26 de diciembre, falleció el arzobispo anglicano Desmond Tutu, símbolo de la resistencia contra el apartheid, promotor de la reconciliación y la conciencia de Sudáfrica. Tras conocerse sobre su deceso, el Papa Francisco expresó sus condolencias a la familia y a los seres queridos de Tutu, «encomendando su alma a la amorosa misericordia de Dios, invocando las bendiciones divinas de paz y consuelo en el Señor Jesús sobre todos los que lloran su fallecimiento con la esperanza segura y cierta de la resurrección».

En un telegrama dirigido al Nuncio Apostólico en el país africano, Monseñor Peter B. Wells, firmado por el Cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin, el papa Francisco recuerda a Desmond Tutu por estar «al servicio del Evangelio, mediante la promoción de la igualdad racial y la reconciliación en su Sudáfrica».

El arzobispo Desmond Tutu había recibido el Premio Nobel de la Paz en 1984, por su incansable lucha no violenta contra el régimen racista, por haber apoyado el proceso de reconciliación nacional en su país y por su denodada defensa de los derechos humanos.

Desmond Tutu, nacido el 7 de octubre de 1931 en la pequeña ciudad minera de Klerksdorp, al suroeste de Johannesburgo, organizó marchas pacíficas durante los períodos más oscuros del régimen segregacionista, pidiendo sanciones internacionales contra el régimen blanco de Pretoria.

Con Nelson Mandela como presidente de Sudáfrica, creó la Comisión por la Verdad y la Reconciliación en un intento de promover la reconciliación entre las dos almas de su país, pasando definitivamente la página del odio racial, poniendo de manifiesto las atrocidades cometidas durante la represión blanca y, al mismo tiempo, intentando fomentar una forma de perdón y reparación moral a las familias de las víctimas.

El  Santo Padre lo había citado en la encíclica «Fratelli tutti» entre «los hermanos no católicos» como uno de los inspiradores de su reflexión sobre la «fraternidad universal».

La muerte del arzobispo Desmond Tutu fue anunciada por el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa, quien expresó «en nombre de todos los sudafricanos, una profunda tristeza por la muerte, acaecida este domingo, de una figura clave en la historia del país».

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