Quito, Ecuador.- El Consejo de Presidencia de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana expresó su preocupación y consternación por la masacre registrada en cuatro cárceles ecuatorianas que dejaron al menos 79 privados de la libertad asesinados. Para los obispos ecuatorianos, los hechos crueles ocurridos el martes 23 de febrero «no son más que el reflejo de la crisis penitenciaria, de la descomposición social y de la indiferencia colectiva».
En un comunicado que se hizo público este miércoles 24 de febrero, los obispos católicos pidieron a los responsables del «Sistema de rehabilitación social» en Ecuador que «realicen una verdadera evaluación sobre el sistema penitenciario y desarrollen programas plenamente humanos» que permitan la rehabilitación de los privados de la libertad para reinsertales en la sociaedad.
El episcopado ecuatoriano calificó de «dolorosa y crítica situación» la que viven las personas privadas de libertad en los diversos Centros de Rehabilitación Social por lo que se hicieron eco de las palabras pronunciadas por el papa Francisco al personal de la cárcel «Regina Coeli», Roma, en febrero de 2019, cuando dijo que «Las cárceles necesitan humanizarse cada vez más y es doloroso escuchar, en cambio, que muchas veces se las considera lugares de violencia e ilegalidad, donde abundan las maldades humanas».
Al mismo tiempo, expresaron su «solidaridad cristiana a las familias de nuestros hermanos privados de libertad que han fallecido, y les aseguramos nuestra oración por su eterno descanso invocando sobre ellos la misericordia divina, al igual que pedimos a Dios la fortaleza y la paz que solo Él nos puede otorgar».
A continuación el texto íntegro del comunicado del Consejo de Presidencia de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana.
Quito, 24 de febrero de 2021
El Consejo de Presidencia de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana preocupado y consternado ante la dolorosa y crítica situación en la queviven las personas privadas de libertad en los diversos Centros de Rehabilitación social y frente a los hechos crueles ocurridos el martes 23 de febrero que no son más que el reflejo de la crisis penitenciaria, de ladescomposición social y de la indiferencia colectiva ante esta dura realidad, asumimos como nuestras las palabras del santo Padre el Papa Francisco: «Las cárceles necesitan humanizarse cada vez más y es doloroso escuchar, en cambio, que muchas veces se las considera lugares de violencia e ilegalidad, donde abundan las maldades humanas». (Cf.Discurso del Papa Francisco al personal de la cárcel «Regina Coeli», Roma,7 de febrero de 2019)
Pedimos a quienes tienen a su cargo la responsabilidad del «Sistema de rehabilitación social» en Ecuador realicen una verdadera evaluación sobre el sistema penitenciario y desarrollen programas plenamente humanos que permitan el cumplimiento de la finalidad que determina nuestra Constitución: «El sistema de rehabilitación social tendrá como finalidad la rehabilitación integral de las personas sentenciadas penalmente para reinsertarlas en la sociedad, así como la protección de las personas privadas de libertad y la garantía de sus derechos.» (Cf. Constitución de laRepública del Ecuador. Art. 201).
Hacemos extensiva nuestra solidaridad cristiana a las familias de nuestros hermanos privados de libertad que han fallecido, y les aseguramos nuestra oración por su eterno descanso invocando sobre ellos la misericordia divina, al igual que pedimos a Dios la fortaleza y la paz que solo Él nos puede otorgar.
La Conferencia Episcopal Ecuatoriana manifiesta su disposición de ayudar a las autoridades y sostener a quiénes hoy sufren la pérdida de sus seres queridos en medida de su misión pastoral al servicio de la sociedad ecuatoriana.
CONSEJO DE PRESIDENCIA
CONFERENCIA EPISCOPAL ECUATORIANA