Las Diócesis fronterizas de Matamoros (México) y Brownsville (EEUU) emprendieron en un trabajo conjunto en el propósito de atender a los migrantes provenientes de diferentes países de América Latina y El Caribe. Como parte de esta iniciativa, la Casa del Migrante San Juan Diego y San Francisco situada en la ciudad de Matamoros, estado mexicano de Tamaulipas recibió tres toneladas de alimento además de una donación económica por parte de la organización internacional Caballeros de Colón en Estados Unidos, presidida por Carl Anderson.
En este evento participaron los obispos de Brownsville, Texas, Monseñor Daniel Flores, Monseñor Mario Avilés (obispo auxiliar) y el Obispos de Matamoros Monseñor Eugenio Lira, los encargados de la pastoral social de cada diócesis, Padre Francisco Gallardo y la directora ejecutiva de las Caridades Católicas Hermana Norma Pimentel.
Obispos a favor de los migrantes
«En este momento la atención solidaria la centramos en Matamoros, ante la llegada de muchos hermanos migrantes a esta región» expresó Monseñor Daniel Flores y manifestó su deseo de continuar colaborando con la causa «seguimos invitando a todos y cada uno para seguir apoyando a la comunidad migrante, lejos de juzgarlos y condenarlos».
Por su parte Monseñor Eugenio Lira mencionó que «es un signo muy bonito de solidaridad de los Caballeros de Colón, quienes se han reunido y han hecho un esfuerzo para apoyar esta Casa del Migrante, en donde se busca tender una mano a nuestros hermanos y hermanas, que, por diversas razones, han tenido que abandonar sus hogares y han venido a buscar el sueño americano».
Acompañar, acoger y solidaridad.
Además de la donación fue una oportunidad para compartir con un grupo de migrantes, escuchar sus testimonios y luchas por alcanzar el sueño americano lo que ha implicado alegrías, tristezas y expectativas. Finalmente compartieron una cena donde se sintió la fraternidad y la esperanza entre los presentes.
Fuente: CELAM