Ciudad de Panamá.- «A ustedes, queridos jóvenes, un gran ‘gracias’ por #Panamá2019. Sigan caminando, sigan viviendo y compartiendo la fe. ¡Nos vemos en Lisboa en 2022!».
«Sólo lo que se ama puede ser salvado. Sólo lo que se abraza puede ser transformado. #Panama2019».
«No olvidemos a las víctimas del Holocausto. Su indecible sufrimiento sigue gritando a la humanidad: ¡Todos somos hermanos! #JornadadelaMemoria».
Son los tres tuits del Papa Francisco que tuiteó desde Panamá en su cuenta oficial de tuiter @Pontifex.
En el aniversario de la apertura de los portones del campo de concentración de Auschwitz, acaecida precisamente el 27 de enero de 1945, cuando las tropas de la Armada Roja ingresaron en la ciudad polaca revelando al mundo el horror realizado por los nazis y liberando a los supervivientes, hoy se celebra el Día de la Memoria.
De este modo también el Papa Francisco ha querido recordar esta Jornada para que no olvidemos a las víctimas del Holocausto.
El aniversario fue establecido por la ONU en el año 2005 para conmemorar a las víctimas de la Shoah, es decir todos los que perdieron la vida como resultado de las medidas de persecución racial y política, limpieza étnica y genocidio aplicadas por el régimen nazi del Tercer Reich y sus aliados, entre 1933 y 1945. Según el Museo Conmemorativo del Holocausto de Estados Unidos, entre quince y diecisiete millones de personas perdieron la vida como resultado directo de los procesos de «arianización» promovidos por el régimen de Adolf Hitler.
Los judíos pagaron el precio mayor, unos seis millones, por ser el verdadero objetivo de la «solución final» perseguida por el Reich. Pero el número de víctimas también incluye a las personas discapacitadas – sobre las cuales se inauguró la experimentación de las estrategias más eficaces para el exterminio masivo – los romaníes, los no arios, los disidentes políticos y los llamados «indeseables», como los homosexuales y los disidentes religiosos. Para mantener viva la memoria, a fin de que estos crímenes no se repitan jamás, cada año, los, ya ancianos supervivientes del Holocausto, se gastan incansablemente participando en conferencias, reuniones con estudiantes y diversas iniciativas de sensibilización.
Fuente: Vatican News