Boa Vista, Brasil.- El obispo de Roraima, Monseñor Mário Antônio da Silva, anunció que a partir de este jueves 1° de marzo se trasladará una comitiva de 19 personas, a la zona de Boa Vista y Pacaraima, en el estado de Roraima, atender a los inmigrantes venezolanos que ingresan a esta región. «Salen de Venezuela por una necesidad humanitaria y es nuestra obligación extender la mano, acogerles», señala.
Según se detalla, en los «últimos 45 días han llegado a Roraima más de 18.000 venezolanos y se estima que a diario llegan unas 300 o 400 personas, todas necesitadas de documentación y con grandes deseos de poder continuar su vida con dignidad».
Según publica la Agencia católica Fides, la iniciativa, que se llevará a cabo hasta el 4 de marzo bajo el nombre de «Misión frontera Venezuela», está coordinada por la Comisión Episcopal de Pastoral Especial para hacer frente al Tráfico Humano (CEPEETH) de la Conferencia Episcopal de Brasil (CNBB).
La comisión tratará de conocer de cerca la situación que viven los migrantes venezolanos que huyen de la crisis política y económica que atraviesa su país y buscan ayuda en territorio brasileño. «La visita sera un punto de apoyo y también de reflexión importante para poder realizar nuevos proyectos al igual que para ayudar, junto con los gobernantes, a atender las necesidades de esta población», agrega el obispo.
Según señala, «es dramático verificar que los venezolanos llegan a nuestro estado, con necesidad de alimentos, de ayuda, de acogida y también de integración en el mercado laboral». Por ello la pastoral de migrantes junto con la pastoral social, Cáritas y el centro de orientación de migrantes y de derechos humanos están tratando de hacer todo lo posible para ayudarles», explica.
Entre las actividades que realizará la comisión están las visitas a diferentes refugios y parroquias como la del Sagrado Corazón de Jesús, donde diariamente se sirven 900 comidas; reuniones con organizaciones locales y de frontera, con ACNUR, y otras instituciones de las Naciones Unidas, así como con el gobierno estatal, entre otros.
Además se elaborará un documento de análisis y de propuestas sobre la contribución que la Iglesia puede ofrecer en lo que respecta a la incidencia, asistencia y denuncia de la situación.
En este periodo las comunidades eclesiales, en sus muchas expresiones (institutos religiosos, parroquias, agregaciones laicales…) han promovido una serie de actividades de acogida y apoyo hacia los venezolanos, pero es necesaria una acción decidida del gobierno para adoptar las medidas oportunas para poder gestionar un fenómeno migratorio de tales dimensiones.
Con 350 mil habitantes, ya acoge a 40 mil venezolanos, según los datos de la municipalidad. Se estima que la cifra aumentará a 55 mil para el próximo julio.
La oficina de la ONU para los refugiados (ACNUR) ha constatado que hasta la fecha unos 24 mil venezolanos han solicitado refugio en Brasil.
Fuente: Agencia Fides